Las creencias limitantes son creencias negativas o pensamientos autolimitantes que pueden impedirnos alcanzar nuestros objetivos y sueños personales. El problema con las creencias es que su poder reside en cómo las percibimos como verdaderas y a menudo las tomamos como hechos absolutos. Esto puede influir en nuestra autoestima, nuestra actitud y nuestra vida en general. A pesar de su potencial para impedirnos alcanzar nuestro máximo potencial, hay formas de superarlas y liberarnos de estas realidades perjudiciales.
Como humanos, todos tenemos nuestro propio conjunto de limitaciones creadas por nuestras creencias y, para muchos de nosotros, pueden ser difíciles de superar. Estas creencias limitadoras, a menudo profundamente arraigadas en nuestra mente subconsciente, pueden afectar a nuestras emociones, comportamiento y capacidad para tomar decisiones y, a su vez, a nuestro éxito o falta de él.
¿Qué son las creencias limitantes?
Las creencias limitantes son los bloqueos mentales, a menudo autoimpuestos, que restringen tu capacidad para ver, procesar y llevar a cabo tareas y situaciones. Pueden obstaculizar tu crecimiento y evolución personal, impedir que alcances tus objetivos y, en general, frenarte a la hora de lograr tu verdadero potencial.
Las creencias limitadoras pueden manifestarse en el lenguaje verbal y corporal y a través de mecanismos defensivos en muchos casos. Familiarizarte con las creencias limitadoras más comunes mejorará tu capacidad para identificarlas cuando estén en juego. Algunos ejemplos de estas creencias son: “No soy lo bastante inteligente”, “No soy lo bastante bueno”, “No merezco el éxito”, “No soy lo bastante bueno”, “No soy capaz de ayudar a los demás” y “No merezco ser feliz”.
¿Cómo nos afectan las creencias limitadoras?
Las creencias limitadoras pueden tener un efecto negativo en nuestra capacidad para tomar decisiones. También pueden impedirnos ver la realidad con precisión y percibir el mundo de otras maneras. Además, estos pensamientos negativos pueden conducir a la intolerancia, la inseguridad y la desconfianza, saboteando las relaciones y las carreras profesionales sanas.
¿Cómo superar las creencias limitadoras?
En esencia, las creencias limitadoras nos obligan a llegar a la conclusión de que algo es imposible. Producen una especie de reacción en cadena en nuestra libertad personal que arrastra nuestros miedos en forma de “no puedo” o “no soy capaz”. Ni que decir tiene que esto puede tener repercusiones negativas en nuestra vida empresarial y personal.
Para poder liberarnos del dominio de las creencias limitantes, el primer paso es reconocer su existencia. Debemos ser conscientes de cuándo tenemos pensamientos limitantes y de cómo nos hacen sentir estos pensamientos. Una vez hecho esto, podemos empezar a desafiar y trabajar cada pensamiento, uno por uno.
1. Cuestiona tus creencias
Independientemente de que creas que ya conoces las respuestas, tómate el tiempo necesario para cuestionar todas y cada una de tus creencias limitadoras. El proceso de cuestionar abiertamente tus creencias puede ayudarte a disminuir su poder.
2. Busca pruebas de lo contrario
La forma en que percibimos la realidad puede ser un reflejo de nuestras nociones y creencias preconcebidas. Teniendo esto en cuenta, podemos desafiar nuestras falsas creencias encontrando pruebas de lo contrario en forma de experiencias personales, investigaciones o hablando con profesionales bien informados.
3. Ríete de ellas
El humor puede ser una gran herramienta para liberarnos de nuestras creencias limitadoras. La risa ayuda mucho a derribar los muros de miedo y ansiedad causados por estos bloqueos negativos.
4. Pasa a la acción
Una vez que comprendemos nuestras creencias limitantes, es hora de pasar a la acción y elaborar un plan. Este plan debe incluir una estrategia para superar las creencias limitantes concretas, como hablar con un terapeuta, tomar clases para aumentar tus conocimientos y empujarte a salir de tu zona de confort.
Conclusión
Las creencias limitadoras pueden ser un gran obstáculo para lograr nuestros objetivos y alcanzar nuestro máximo potencial. Sin embargo, desafiando estas ideas, opiniones y pensamientos negativos que a menudo se creen erróneamente verdaderos y comprendiendo cómo estas creencias están afectando a nuestras vidas, podemos liberarnos de estas falsas realidades y aprovechar todo nuestro potencial.